Los motivos para comenzar una dieta vegetariana, ya sea pensando en una alternativa más saludable para el organismo como una posición ética ante el maltrato animal no deja de significar un desafío en cuanto organizar un plan alimentario adecuado para evitar los riesgos de una mala alimentación.
Es sabido que hay nutrientes críticos en una dieta vegetariana. En primer lugar, quiero mencionar a las proteínas, puesto que las proteínas vegetales tienen menos digestibilidad y poseen en general menor valor biológico, por ello a la hora de hacer una dieta se requiere de la combinación de las fuentes proteicas vegetales.
Otro nutriente importante es el hierro, puesto que su disponibilidad y su absorción se ve dificultada en la dieta vegetariana. La vitamina B12 de origen vegetal no es activa en el ser humano, por tanto, deberemos suplementar adecuadamente.
El calcio es un nutriente muy especial, porque tiene muchas funciones en el organismo, una de las principales es formar parte del tejido óseo. Se requerirá de una planificación especial para mantener el aporte adecuado durante el desarrollo óseo.
En las diferentes etapas de la vida nuestro organismo requiere algunos nutrientes en forma particular. Habrá que considerarlas para acompañar esos momentos biológicos distintos. La adolescencia y el embarazo son dos situaciones particularmente necesitadas de evaluación y consejo nutricional
El estudio inicial de un paciente vegetariano requerirá de un examen físico completo, un estudio de la composición corporal y análisis de laboratorio suficientes para entender la situación lo más pormenorizada posible y planificar su alimentación y suplementación necesaria.